Me enamoré de Lanzarote

Sin duda, Lanzarote siempre estará en mi corazón. Fue el sitio en el que me volví a sentir yo, volví a recuperarme después de unos meses muy duros, recuperé la ilusión por las cosas, desconecté y cargué pilas como nunca.

Estuvimos 3 noches y 4 días para recorrernos la isla.. y madre mía ¡Qué isla! Una isla que impresiona por su paisaje tan característico, el plan de recorrer con el coche todos sus kilómetros cuadrados de geografía de lava y mar realmente me llevó a pensar que estábamos en otro planeta. Paisajes que te dejan sin respiración, un silencio estremecedor y el mejor plan a veces es no hacer nada y dejarse llevar por lo que te puede ofrecer la isla.

Crear con absoluta libertad, sin miedos y sin recetas, conforta el alma y abre un camino a la alegría de vivir
— César Manrique

Si tuviera que hacer una lista de los lugares más impresionantes de Lanzarote sin lugar a dudas diría:

  • Parque Nacional Timanfaya

  • Jameos del agua

  • Fundación César Manrique

  • Jardín de Cactus

  • Ruta por volcanes: Caldera Blanca

  • Si tienes tiempo: Isla La graciosa

  • Playas como Papagayo, Famara, playa Quemada, playa Blanca

Todos los días tuvimos mucho viento, excepto un día que pudimos disfrutar de la playa, los otros días necesitábamos un abrigo finito para no pasar frío.

Nos alojamos en la casa tan preciosa de Gabby que nos hizo sentir súper cómodos. Ella que es muy amable y tiene una vitalidad contagiosa, sus indicaciones nos ayudaron mucho. Nos hizo una lista de las muchísimas actividades que puedes hacer por la isla que no salen en una guía de viajes. Os recomiendo 110% ir a dormir a “Espacio Fenómena”. Top de la isla. https://espaciofenomena.com/

Los días los estructuramos en 3 completos:

  • Primer día: Pasear por los pueblos de Haría, Uga, Geria o Yaiza, perderse por allí, descubrir cada rincón de estos pueblos. Ver cualquiera de sus mercados locales y comer en alguno de sus restaurantes más míticos como la bodega de Santiago (recomendación personal de mi amigo Carlos) o en el Chupadero (una bodega renovada en Geria).

    En Haría cerquita se encuentran los Jameos del agua, sin dudarlo para mí fue uno de los recuerdos más increíbles que guardo de la isla. ¡No te lo puedes perder!

  • Segundo día: Día de surf en cualquier sitio el plan es perfecto ya sea en Famara o La Santa. Nosotros fuimos a Famara y nos encantó, tienes muchísima oferta de locales que puedes alquilar tabla y neopreno o incluso pedir clases particulares para volverte un pro encima de la ola. No te olvides de comer luego en El risco en Famara un sitio de pescado y marisco fresco que no te puedes perder.

    Por la tarde ir a Teguise y allí ver la Fundación de César Manrique, pasear por el jardín de Cactus o ir a la playa de las cucarachas. Un pueblo que no te puedes perder por su encanto.

  • Tercer día: Tienes diferentes opciones o vas a La Graciosa o terminas de ver la isla como Isla Papagayo que es muy típica pero realmente vale la pena. No cometas el error de comer en el chiringuito que hay al lado del parking es una turistada.

    Un plan que nos encantó fue hacer la ruta de los volcanes (Caldera Blanca) y ese día recorrer el Parque Nacional de Timanfaya, un espacio natural protegido y hacer un recorrido en guagua.

    Realmente es una isla maravillosa y es tan fácil desconectar y sentir tanta paz cuando llegas allí porque realmente tienes la sensación que se para el tiempo.

  • Comer y tomar algo: Restaurante Sabe (calidad precio bien), uno de los mejores de la isla. Desayuno brunch en Kalma Café. Pescado y marisco en Casa Tomás, Casa Carlos o Brisa Marina y Carne en el Diablo (Timanfaya) que cocinan con el calor geotérmico.

    Espero que os hayan gustado mis recomendaciones.

    Con mucho cariño siempre,

    Cristina S.

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